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Toggle¿Qué es la propiedad horizontal?. La propiedad horizontal regula la propiedad de aquellos inmuebles divididos en unidades individuales (pisos, locales, trasteros, etc.), pero que comparten elementos comunes, como escaleras, jardines o ascensores. Un régimen que se basa en el equilibrio entre los derechos privados de cada propietario sobre su unidad y los derechos colectivos sobre los elementos comunes del inmueble.
Sin embargo, no se trata únicamente de un concepto legal, sino que también influye directamente en nuestra vida cotidiana, regulando las normas de convivencia, el uso de los espacios comunes y la gestión de los gastos del edificio.
A continuación, te explicamos con todo detalle qué es la propiedad horizontal, cómo se regula, las diferencias que existen con respecto a la propiedad vertical y los derechos y deberes que conlleva.
¿Qué es la propiedad horizontal?
La propiedad horizontal establece una relación jurídica entre los propietarios, y la convivencia dentro de una comunidad, regulando tanto los derechos como las obligaciones de todos los vecinos a través de la Ley 49/1960, de 21 de julio, sobre Propiedad Horizontal, y el artículo 396 del Código Civil.
Cada propietario tiene derecho exclusivo sobre su unidad, pero también posee una cuota de copropiedad sobre los elementos comunes del edificio, como escaleras, tejados, jardines y otros elementos comunes.
En la práctica, esto quiere decir que, aunque podamos ser dueños de un piso o local, esto no nos da el control total sobre las áreas comunes del edificio. Con lo cual, si un vecino decide reformar su cocina, no nos afectará directamente, pero si hay que realizar una reparación en el tejado, todos los copropietarios deberán colaborar con los gastos.
Propiedad Vertical vs Propiedad Horizontal
La propiedad vertical y la propiedad horizontal son dos formas de titularidad de inmuebles que, aunque pueden parecer similares, presentan importantes diferencias que influyen en la manera en que se gestionan los edificios.
- En la propiedad horizontal, cada propietario tiene un derecho exclusivo sobre su unidad, pero también comparte derechos sobre los elementos comunes del inmueble.
- En la propiedad vertical, todo el inmueble es propiedad de una única persona, que puede optar por alquilar o destinar diferentes partes del edificio a distintos usos, sin que exista una comunidad de propietarios.
Diferencias clave
- Número de propietarios: en la propiedad horizontal, el inmueble se divide en unidades independientes, lo que genera una comunidad de propietarios. En la propiedad vertical, el inmueble tiene un solo propietario que decide cómo gestionar el uso de cada parte del edificio.
- Elementos comunes: en la propiedad horizontal, los propietarios comparten elementos comunes que deben mantenerse y gestionarse de forma colectiva, mientras que en la propiedad vertical, no existe una comunidad que regule el uso de estos elementos, ya que solamente existe un único propietario.
- Participación en gastos: los gastos en propiedad horizontal se distribuyen entre todos los propietarios en base al coeficiente de participación de cada propietario, mientras que en la propiedad vertical, el único propietario se hace responsable de todos los gastos de mantenimiento.
¿Cómo se regula la propiedad horizontal?
La regulación de la propiedad horizontal en España está principalmente establecida por la Ley 49/1960, sobre Propiedad Horizontal, que determina los aspectos fundamentales de la convivencia entre los propietarios, como el uso de los elementos comunes, el reparto de los gastos, la celebración de juntas y la toma de decisiones.
Además, cada comunidad de propietarios puede establecer un reglamento interno que regule aspectos más específicos de la convivencia, como los horarios de uso de las instalaciones comunes, las normas para la realización de obras o reformas, el uso de servicios como la piscina o el ascensor.
Aunque no son obligatorios, los Estatutos de la comunidad de propietarios, son muy recomendables para regular la convivencia en la propiedad horizontal, estableciendo las reglas sobre el uso de las propiedades y la gestión de los elementos comunes. Pudiendo ser de gran utilidad para resolver posibles conflictos entre vecinos.
¿Qué es la propiedad horizontal?: Ámbito de aplicación
La propiedad horizontal se aplica en diferentes tipos de edificios y complejos inmobiliarios, siendo bastante habitual en bloques de viviendas. Sin embargo, no se limita únicamente a los edificios residenciales, sino también a complejos de oficinas, comunidades de chalets o incluso naves industriales. En todos estos casos, se mantiene el concepto de «elementos comunes» y de «propiedad privativa», facilitando la convivencia y la gestión compartida del inmueble.
¿Cómo se constituye una propiedad horizontal?
La constitución de una propiedad horizontal se realiza mediante escritura pública ante notario, que posteriormente debe ser inscrita en el Registro de la Propiedad. El proceso puede ser iniciado por un único propietario o por un grupo de propietarios que controlen el 100% del inmueble.
Una vez constituida, se asignan las cuotas de participación a cada propietario, que determinarán su responsabilidad en los gastos comunes y su peso en las votaciones de las juntas de propietarios.
¿Qué es la propiedad horizontal?: Órganos de gobierno que podemos encontrar en el régimen de propiedad horizontal
Dentro de una comunidad de propietarios regida por la propiedad horizontal, existen diferentes órganos de gobierno encargados de la administración y la toma de decisiones. Los más destacados son los siguientes:
Junta de Propietarios
Es el órgano máximo de decisión y está formado por todos los copropietarios del edificio. En las juntas, se toman decisiones importantes como la aprobación de presupuestos, la ejecución de obras y la adopción de acuerdos sobre el uso de los elementos comunes.
Presidente, Secretario y Administrador
La comunidad de propietarios elige a un presidente que coordina las juntas y representa legalmente a la comunidad. Pero también se puede nombrar un secretario y a un administrador. En concreto, el administrador es una figura clave, ya que se encarga de la gestión diaria del edificio, como la organización de las juntas, la elaboración de presupuestos y el control de los gastos.
Derechos y obligaciones de los copropietarios en propiedad horizontal
Ser propietario en un régimen de propiedad horizontal conlleva una serie de derechos y obligaciones que buscan garantizar una buena convivencia y el buen estado del edificio.
Derechos de los propietarios
- Derecho a usar y a disfrutar de su propiedad.
- Derecho a votar en las juntas de propietarios.
- Derecho a proponer mejoras o cambios en el uso de los elementos comunes.
Obligaciones de los propietarios
- Mantener en buen estado su propiedad.
- Contribuir a los gastos comunes según su cuota de participación.
- Cumplir con las normas de convivencia establecidas en los estatutos.
¿Se puede extinguir el régimen de propiedad horizontal?
En determinadas circunstancias, el régimen de propiedad horizontal puede extinguirse, como por ejemplo, cuando todos los propietarios acuerdan unánimemente disolver la comunidad. Una decisión que puede responder a distintas razones: desde la necesidad de rehabilitar completamente el edificio hasta su venta total a una promotora para una nueva construcción o transformación del uso del inmueble.
En estos casos, es necesario proceder a la venta o adjudicación de los elementos comunes, y redistribuir la propiedad según lo que acuerden los copropietarios. Además, debe otorgarse una nueva escritura ante notario y registrar el cambio en el Registro de la Propiedad, lo que puede tener importantes implicaciones económicas, fiscales y urbanísticas. Con lo cual, es muy importante asesorarse bien antes de dar el paso.
Ejemplos prácticos
Reforma en la fachada del edificio
Imagina que uno de los propietarios decide cambiar el color de las ventanas que dan a la fachada del edificio. Dado que la fachada es un elemento común y su modificación podría alterar la estética y la uniformidad del edificio, lo normal es que se necesite pedir autorización a la comunidad de propietarios antes de realizar cualquier cambio.
Instalación de un aire acondicionado
Si un propietario quiere instalar un aire acondicionado en su vivienda y la unidad exterior se va a colocar en un lugar visible desde el exterior del edificio, se necesitará la aprobación de la junta de propietarios, ya que este tipo de instalaciones podría modificar la apariencia del inmueble y afectar a la comunidad.
Reforma interna en una vivienda
Si un propietario decide hacer una reforma interna en su vivienda, como modificar la distribución de las estancias o instalar un nuevo sistema de fontanería, no necesitará la autorización de la comunidad, salvo que la reforma afecte a la estructura del edificio o pueda poner en peligro la seguridad general del inmueble.